Una de las experiencias más bonitas que he tenido.
Hoy os voy a escribir sobre una de mis experiencias mas satisfactorias y gratificantes como profesional. De hecho tengo varias de muy bonitas, pero ésta es especial ya que era la primera vez que me pasaba con gemelos y para mi ( y creo que para muchos) era un gran reto.
Vino en enero del 2019 una madre gestante de gemelos, los bebes venían de nalgas y uno de ellos estaba transverso también. Le habían comentado que podíamos "girarlos". NO, los osteópatas no giramos, mucho cuidado con las palabras que usamos, nosotros podemos dar espacio para que ellos se giren y normalmente lo hacen a no ser que haya una fuerza mayor y no puedan. En un embarazo de nalgas, yo siempre había trabajado con madres gestantes de un solo bebe, no de dos, así que el reto era bonito. El reto era grande, el espacio es menor, no teníamos el tiempo a nuestro favor y yo no había tenido un caso de gemelos de nalgas antes. Manos a la obra fuimos trabajando, primero abriendo y dando espacio a los diferentes diafragmas, para luego trabajar la linea media de los bebes con la de la mama, hasta que finalmente trabajamos la linea de cada bebe, junto con la linea común que ellos dos creaban junto con la línea de la mama y ambos se giraron obteniendo una buena posición para poder salir. Al cabo de 3 visitas y estando en la semana 38, la mamá me comentó que ya se encontraban boca abajo y en una óptima posición para salir...
Después de todo el trabajo, la mama me comentó que quizá seria cesárea igualmente, ya que era un parto gemelar y los ginecólogos preferían tener un final feliz y no sufrir. Contra todo pronóstico y con gran gratitud hacia mí, la mamá se puso de parto teniendo un parto vaginal y con toda normalidad el pasado 12 de febrero 2020. Que gusto recibir noticias así.
De vez en cuando iré colgando pequeños casos o algunas experiencias, siempre de manera breve, pero importantes para mí, espero que ésta os haya gustado. :)